martes, 25 de septiembre de 2007

Nada se sujeta... .


Piensas que la vida es tuya, y de esa manera la vives, te encanta la ambigüedad, y un día te das cuenta que eres precursor de la tristeza, el preámbulo de la muerte.
Tienes fobia por las arañas, por los pasamanos de las estaciones de metro, y enguantas látex en tus dedos, nadie te merece, y así vas séptico sin tocar microbios ajenos, y en cada esquina cambias de pañuelo, das pena a la gente, no porque en sí des pena, sino la emanas por doquier.
Tu hermano mayor te llamó fracasado, que sabrá él, si te tocó tragarte toda la basura del patio de tu casa.
Te cuenta historias grotescas y canallas, de soslayo recuerdas las sabanas percudidas que vuelan al viento salitroso, y corrosivo, mientras tu sangre amiga de la única virginidad que tenias se va por el desagüe de la ducha, y escuchas a las gaviotas como se devoran tu dignidad, y comienzas a ser malo. Porque eres malo tan malo que nadie riega los postes llenos de cal y azufre de tu enrejado.


No vengas a juzgar, no toque, no sientas piedad, sólo sientate en el centro de la tierra.

Y regresa
Regresa siempre.

Sis us plau.

No hay comentarios: