domingo, 30 de diciembre de 2007

Los años, el tiempo

Todo cambia

"Cambia lo superficial
Cambia también lo profundo
Cambia el modo de pensar
Cambia todo en este mundo
Cambia el clima con los años."

Julio Numhauser

No es menos cierto que los cambios aterran más que el tiempo,
Esta senda claraoscura que te envejece y lleva.
Son los cambios congelados con nombres y apellidos.

El tiempo no existe:
El pasado ya no está, ayer fuiste infeliz, pon fecha para que lo recuerdes.
Así tuvimos necesidad de recordar la tristeza y la felicidad.
Los fracasos y el éxito.

Pero ya no están, no existen, son láminas en tu memoria,
el tiempo en pasado es la cosa más inexistente.

"Volver a los diecisiete, después de cumplir un siglo es como decifrar signos sin ser sabio competente, volver a ser de repente tan frágil como un segundo"

"Buena salida y buena entrada": Dice la felicitación del cambio de año.
La salida se fue en cuanto la pronunciaste y la entrada, es tu proyección que se acerca, cuando la tengas frente , será otra.

Sólo los elegidos, pueden jugar con los hechos, y los que obligan a los hechos a que solapen al tiempo siempre terminan desquiciado.

El futuro es tan incierto, que por eso le ponemos nombre. ¿Te crees dueño de los actos que te acontecerán? Ideamos futuros y gastamos la vida en ellos, en días, semanas, meses, años y vidas... .

"Este ser humano tiene futuro"
¿Cuando? en este momento.
Mil cosas pueden cambiar a ese individuo que se le vaticina "futuro".
El futuro también es la indigencia, la derrota o la locura.
Lo absoluto real que súbitamente corre a morirse, es el efímero Presente, huidizo y prófugo siempre, pero del que sentimos su aliento.

Intenta ser una mejor persona, porque incluso el tiempo que gastaste ideando tus envidias y maldades, ya no existe.

Todo al ser pronunciado, desaparece por esa senda que inventamos para eludir el miedo, y cerrar los ojos ante la vida que es este fugaz momento:

Ya se fue.
P.D
Año 2007 por ser cabalístico, dijimos que nos iría bien.

jueves, 27 de diciembre de 2007

La Maldita


Señores por favor perdonen a la Diosa, viene a pie porque no tiene burro...
Que sin tener yo la culpa, su tristeza me mata.

El Demonio se sorprende, al verla tan cansada y vulnerable.

Yo corrí para la luna para avisarle a Dios, más la Diosa me paro.
Puso su talón agrietado en mi cuello, y sus cabeza ardía, la estaba quemando el Sol.
Cuando pude liberarme, regresé al pasado, a una hilera de casuchas donde viven los santos y los Lords, pero el Sol me perseguía sin compasión.

Le di la noticia a los mineros, arrieros y prostitutas y no creyeron
Yo no proteste por mí, sino por la Diosa,

La Maldita llego coronada con su corona de destrucción
y mando a sus sicarios a que me pusiera a cultivar la tierra.
La mejor manera de olvidarte de la humanidad es trabajar la tierra.

Para mi tristeza
me dieron una margarita, pregunté que si me quería: Mucho, poquito o nada, y en la espera se heló mi corazón.

Como yo no tengo burro, también huí caminando, entonces la luna abofeteo al Sol y alumbró mi camino por muchos siglos.

Desperté aquí, y tengo ganas de llorar porque tengo que partir

¿Por qué si acabo de arribar el martes pasado?

domingo, 23 de diciembre de 2007

Hojarascas Muertas Vol.VI


Los estragos del saber.


Escrito y publicado en la Revista Cultural "La maga" de Rayuela.
En el año 1999, Valladolid ciudad de muertos.




Yo vivía tranquilo y perezoso en una selva oscura, mi cerebro distinguía con exactitud el graznido de las aves, el silencio de la noche, los susurros de las hojas y la algarabía de la lluvia sobre el pantano.

Mi mundo tenía altas y amuralladas latitudes, terminaba como el Reino de Olar cruzando las Montañas Lisias, todo lo demás era un indescriptible universo aciago en el que no me dedicaba a pensar.

Las migratorias aves algunas veces me hablan de cajas sonoras, de letras y de signos, de sueños y de amores, de recetas para enfermos del alma comprimidas en letras que instigan al cerebro e inspiraban reflexiones, luego se marchaban porque siempre hay que regresar, y se llevaban mis dudas junto a sus cadáveres, en su delicioso aleteo.

Yo amo a las aves, por eso mi casa es una jaula de plumas de avestruz y de cigüeñas. Cierto día un hombrecillo de rizos de oro me habló de una flor, de aviones, pájaros metálicos y quise saber el color y el olor de este requiebro, su tamaño, su función en la tierra.
¡Cuántas preguntas! Entonces el hombrecillo se marchó dejando mi cabeza con una ansiosa resonancia, muchos años después, ya viviendo en EL OLVIDO: En occidente, supe que era un Principito.

Un lobo bueno, amigo mío nacido en las estepas, vagabundo y demente, osado y mentiroso, vulneró mi ignorancia y me regaló una saca repleta de libros, silenciosas cajas que me hablaban al oído, del odio de los hombres, de hombres mal paridos, de Reyes y Princesas, de Torres gigantes, de países lejanos donde hablan otras lenguas, personas que viven en la garganta de una ballena, ¡Señor que confusión! De dónde han salido todos estos seres que han invadido mi mente, una tal Madame Bovary que se instaló en mi cortijo, su marido cuida las plantas como lloroso, dolido, y ella siempre sentada nerviosa rompiendo el aire con su abanico.

Mi selva se transformaba, con Alicia y sus amigos, con la Torre de Babel instalada en mis odios, entonces empecé a mentir, indigestión de leyendas, tanto mito, tanto mito me convertí en mitómano, la selva no era más mi selva, mi casa tenía ladrillos y pilares de novelas pendientes de ser leídas.

“Metamorfosis” al fin, metamorfosis, mi frente empezó a cambiar, una mañana sin prisas decidí cruzar el mar, ansioso de entendimiento, de historias para conocer más y olvidar.

Así conocí ciudades sentado en el mismo sitio, escuchando los rumores de poetas fallecidos, o de viles anacoretas, que confunden al personal con sus corrientes perversas.

Había llegado al país de las letras, con selvas y con castillos donde todo es misterioso, amoroso, con crimen y con castigo, las aves son de otra pluma y de las plumas sale un río de una sustancia negra, suave de deslizar.

Tengo dos primas gemelas, que no se hablan entre ellas, además levitan las perras, tengo en mi cabeza siete cuervos como ovejas, siete cuervos muy distintos porque son verdes, comen perlas.


¡Ay Señor que confusión!, Confucio vino a probar no sé si volver a mi ignorancia o de plano despertar, ¡Hay señor gran confusión! pues no me atrevo a quitar, esta manzana podrida que llevo en la espalda y me hace pensar, cambiar, desear, olvidar.

Sumido en mi depresión por un paseo de letras, un buen trago de adjetivos, una comparsa de oraciones, despacio muy despacio me interno en su hechizo y así es como vivo ahora, inteligente, confundido, ágil de mente, vivaz, soberbio, perdido, nadie me puede tocar.





Diego Montoya

viernes, 21 de diciembre de 2007

"Humo, suspiro y nubes"


¡Qué Nadie!

Que nadie toque la cama
donde suspiró mi carne,
que no ventilen la ropa,
que no encorseten desmadres
porque aunque estoy medio loca
ahora quiero refugiarme
junto a los lastres dormidos
que palpitan mis verdades.

No fui santa, ni pura
sólo viví realidades,
frustradas pasiones siempre
que no las comprendió nadie.
Acaricié primaveras
y tuve sueños tan grandes
que llené de humeda brisa
los entresijos del aire.

Volé bajo el raso suelo
sin ganas de encararme
y vi crecer las raíces
como enmarañadas cárceles,
toqué posibles vestigios
en rincones intocables.

Mi sangre es caliente, verde
jamás puedo equivocarme.

Un poema del último libro de mi amiga Aracelí Simón: "Humo, suspiros y nubes"

http://www.aracelisimon.tk/
http://www.aracelisimon.tk/

jueves, 13 de diciembre de 2007

Mis latinos... .


Vinieron de noche, primero llego el de los cabellos largos, venia cansado de las colmenas, con guirrios en las entrañas, y mil kilómetros de culturas ajenas, mezcla de Guayaquil, y los hombres hermosos.
No eran mellizos, sólo hermanos que querían sacar la cabeza arriba del nivel del mar.
Eran tan angostos, que cabían dentro de una diminuta caja de mensajería.

Ayer llegaron obsesos y etílicos, los chicos de Guayaquil, nunca tuve miedo, aunque son el miedo personificado.

Cuantas veces los mataron, cuantas los resucitaron, fueron enterrados, adorados, y velados entre guirnaldas de un continente que chupa sangre de la tortura de los injustos.

El Rey le vuela la melena al viento, el Principe aborigen esta pensando las estrategias del sol y el volumen del viento, el calor de los decibelios.
No sabe que la ambigüedad aquí, lejana de ser pecaminoza
Tiene principios de Reina y Poderosa Señora.

Salgo de Guayaquil con la las banderas del mundo en los sobacos,
Salgo de Guayaquil con los mares en los ojos, deseando y añorando, ser por un momento el dueño de los dos polos: Me gusta el Norte porque remueve mi inteligencia, el sur tiene la capacidad de perturbarme mentalmente. Y a veces los orgasmos viciosos de la inteligencia suelen ser tan incapacitados de piedad, que te sodomizan el alma.

Salgo de Guayaquil, con nada en las manos, una niña diminuta como una hormiga, muerde una Guayaba tan madura que huele a podrida, y me alimento de ella como un sobreviente.

Y eso es lo que soy un sobreviviente caminando descalzo por las aceras ardiente, como el mismo infierno, el asfalto asqueroso de Guayaquil.

miércoles, 12 de diciembre de 2007

Un hombre que le dolía todo: Incluso respirar.

Me uno a ese homenaje que te hacen los perseguidores de tu voz desgarrada y tierna, de letras y aguardiente.

Elegía a unos de los mejores actores de teatro que ha tenido la Ciudad de Valladolid.

Nacho de Paz Simón

Abrí la puerta y parecía escuchar "Mamá, bonita"

Esta vez, tuve muy claro que te habías ido, en silencio, sin molestar y con ese desgastado optimismo, cargando con tu pesado silencio y tragándote el humo del mundo entero.

La ciudad no tenia la sonrisa retratada por la Señora Sastre.
Ese gesto tuyo pleno de optimismo, sonrisa anicotinada.
Dueño absoluto del arte de la interpretación.
Al final fuiste el mago perfecto, porque fingir es la única magia que podemos hacer los humanos.

Abrí la puerta y supe que cuando menos de este mundo, habías marchado para siempre.

Y hablando de los humanos Nacho... .
Cuantas veces, nos preguntábamos el por qué de nuestra auto-destrucción .
Somos seres que nos duele la vida.
Y cuántas tantas, observamos el comportamiento asustado de la gente, que se justificaba y consolaba, midiendo su continencia con nuestra entropía.

Curioso el ocaso, luces de bohemias, . Te fuiste como eras sin molestar, pero molestándonos a todos, sin nunca saber que hacer.
Diría tu madre: Nachillo acercame el tabaco, traeme las gafas. "Pavesas, Pavesas"
La dejaste tan desolada, que por las noches se convierte en polvo de cristal y aulla.

martes, 11 de diciembre de 2007

Yo aprendí a hablar Español Latinoamericano... .

Recibo nuevamente la llamada de un gran amigo, obseso con la ortografía y por ser muy cercano cruel conmigo.
Su crítica: la de siempre, mi daltonismo con "C", "S" y "Z", con "J" y "G" cuando suena a jota.
Soy diplomado en Relaciones Públicas y Protocolo. Jamás estudié letras y aún no memorizo las reglas básicas de las tildes, casi he tenido que aprender de memoria que palabras son acentuadas, pero tengo la necesidad de escribir.

Y si el Premio Nobel de Literatura Gabriel García Marquez confunde lo mismo que yo, porque somos hispanoamericanos, voy a dejar de sentir miedo al escribir, y dejaré que los dedos vuelen.

Perdonar los errores, antes lo dije tengo muy malas costumbres.

Las sopas de Malta.


Salgo de casa, veo los mismo edificios, tienen ese ¿Qué se yo?
Lo de siempre en la calle, el tranvía y sus polizontes.

Salgo de casa y espero la banderita de taxi libre, observo las tres luces del semáforo.
Cojo un taxi, voy al aeropuerto, trepo en un avión, quiero besar la luna, ver algún astronauta, pero no es así. Nada existe fuera de mí.

Voy al centro del Mediterráneo, un destino final, como escogido en una partida de cartas: Malta.
Un terraplén de salvación entre Europa y África.
La pisoteada Malta, con Gozo y Comino: Dos islotes: Cominetto y Filfla tan insignificantes que no figuran en los mapas del mundo.

Me encuentro sin dormir en La Catedral de San Juan, impresionado por la riqueza de los Maestres de la Orden de San Juan: "Los Caballeros de Malta", a la par pienso en el estrecho sitio donde viven 400,000 seres humanos, 27 kilómetros de largo por 14 de ancho. Hacinados y todos conocidos: Irremediablemente pregunto: ¿Cuál será la tasa de suicidios de la población?

Entro a la Catedral y descubro a Caravaggio: Rebelde, ambicioso, llamado el Shakespeare de la pintura. Decidido a someter sus lienzos al imperio de la verdad, por más horrorosa que pareciera en esa época. (La verdad y la Orden de Los Caballeros de Malta, no hicieron nunca buenas migas)
Entras a la sala del Maestro, y majestuoso, intacto y dramático te recibe el lienzo "La degollación de San Juan Bautista". La otra obra, genial es el "San Jerónimo" más famosa por haber sido robada de la misma catedral a finales del siglo pasado, que por si misma.
El Santo escribiendo en su celda, traduciendo la Biblia, el anciano protagonista del cuadro, es lo único luciente y vivo, despojado de sus atuendos de Gran Cardenal enrollados a su cintura, torso desnudo y enclenque, profundamente concentrado. Se aprecia una Cruz de Malta, un cráneo, y sin explicarme, porque no conozco las palabras adecuadas, sólo puedo decir, que el juego de la luz con el cuerpo del anciano es tan vital, que sin el, la obra sería una noche oscura.

Salgo de la Catedral, con mi ansiedad bulímica, tomó asiento en cualquier sitio de La Valleta y entonces comienzo a saber que Malta es el país donde las sopas son las más ricas del mundo.

jueves, 6 de diciembre de 2007

Una percepción de México... .


El hermano me contó que lo secuestraron: Desdes entonces no duerme y sufre delirios de persecución.

El Antonio

lunes, 3 de diciembre de 2007

Un pleonasmo

Un pleonasmo para el aburrimiento... .

Yo viendo me mojo... .
Lloviendo me mojo... .

sábado, 1 de diciembre de 2007

Hojarascas muertas Vol.V


"Un poema para nadie"

23 de mayo de 1991.
San José del Cabo, Baja California Sur
México.


A nadie le importa que duerma con la luz encendida
ahuyentando pasados y nostalgias,
que tiritan entre mis sabanas y el pasillo de la estancia de los vecinos de enfrente.

Con la luz encendida para congelar los miedos
que besan amoroso mis párpados... .

Asusto brujas que quieren devorar mis pies,
para llenas huir despacios por las rendijas.

No me importa que el resto del mundo duerma con la luz apagada
Calentando sus frentes con lo que nunca será.
Pensando que despertaran en una alcoba lejana.

Porque la noche
es una oscura señora que no duerme,
tocándose el sexo si cesar

Y además ronca, medio bailando, medio volando, con los ojos desorbitados espera el día.
¿No ven que la noche no duerme?

Parece que sólo yo lo veo... .